Comienzo del viaje (dia 13, Mes del Dragon, Decimo Octavo año de Hantei XXXVIII)

-Pensando la cantidad de mercancias que transportamos, no me extrañaria que nos estuvieran siguiendo rio arriba.- Te dice rascandose la cabeza y luego secandose el sudor usando un trapo de cuadros grises.

-Sí... pero la cuestión es si son amigos o no... procuraremos estar más alerta si cabe por si acaso.

Me acaricio un poco la sien con la punta de los dedos.

-... Ojala las fortunas nos sonrian y este viaje siga siendo igual de tranquilo.

Da una palmada manteniendola palmas juntas en señal de oracion. -Que Osano-wo nos sea propicio.-

Asiento, y me retiro inclinándome con respeto, para luego seguir buscando a los demás guardianes de la galera.

El ultimo de vosotros se encuentra en el interior recostado sobre una pared dormitando a la sombra con un pañuelo empapado en la cabeza y crees que esta dormitando.

Mejor no despertarle bruscamente. Quizá no sea su turno.

-... ¿Compañero?

Si no fuera por que lo tienes delante, jurarias que lo que escuchas es un bufalo y no un ser humano.
El mugido parece un gesto para que sepas que esta despierto y posteriormente te saluda con la mano.

Como si fuera un deja-vu, estabas esperando la respuesta... otro mugido, pero que claramente siene otro tono distinto para que entiendas un si.

Ciertamente, miembros como este son los que a veces nos dan la reputación que tenemos.

Bueno... lo digo rápido y me voy. Hasta un Hinin tiene derecho a descansar después de trabajar.

-Procura estar atento en tu próximo turno, compañero. Tenemos motivos para creer que alguien conoce la posición de la galera.

El deja-vu se repite ... otro mugido y despues unas pocas palabras. -Hai, Hida-san.-

Bueno... sólo queda informar a uno más. Ignoro si me ve mi compañero Hida, pero me inclino con cierto respeto, y me voy.

Voy a buscar al dignatario Yasuki... espero que esté mejor de esos mareos.

Por mas que miras en la cubierta, el diplomatico no aparece.

...... Quizá deba ir a verle personalmente, y no esperar a que salga.

Me acerco a mi compañero Hida, el primero.

-Compañero, voy a ver al dignatario. No creo que sepa lo sucedido.

-Llevale una calabaza de sake "Hermano", creo que hoy no esta especialmente bien.- Te dice mientras te hace el gesto de alguien que esta vomitando hasta la ultmia papilla.

No sé por qué mi cabeza me juega una mala pasada y por un momento pienso en tomarle en serio con ese comentario. Acabo sonriendo un poco.

-Si lo hiciera sería divertido, sí... Mantente alerta, Hida-san.

Me voy a buscar al dignatario... puede que esté en sus aposentos.

Al bajar al lugar donde duerme el dignatario, este no esta. Lo buscas cerca de donde duerme y no esta. Extrañado te dirijes a la proa del barco por la bodega.

//Percepcion.

percepción, 1 vacío, 3 dados//

El miembro 'Hida Takeda' ha efectuado la acción siguiente: Ofrenda a Omakasede No Kami

'Accion' :

Buscas al dignatario por toda la bodega y cuando estas a punto de abandonar, te percatas de que el casco en la proa tiene una grieta, no muy grande, pero lo suficiente para que os pudierais undir si no lo embreais pronto.

Por las Fortunas.... esto es malo.

Me quedo mirando, congelado unos segundos, y procesándolo. No podemos arriesgarnos a perder la carga ni a que nadie se ahogue en el rio... ¿Para qué formalismos? Esto es urgente.

-¡Tenemos una grieta! ¡Que venga alguien! -digo en alto dando una voz, para que me oigan.

Bajan dos de los marineros corriendo y el samurai que esta de guardia ese turno.

Les señalo la grieta.

-Rápido. No podemos arriesgarnos a que se hunda la galera. Traed lo que necesiteis y a quien necesitéis para arreglarlo y hacedlo cuanto antes.

Tras unos tensos 15 minutos trabajando, han conseguido aislar la grieta y achicar el agua.

Con el alboroto, el dignatario a salido y estas "oliendo" a ver que ha pasado.

Cuando aparece, me inclino con respeto.

-... Ya está todo arreglado, Yasuki sama. Había una grieta. Gracias a las fortunas que la localizamos a tiempo.