Un paseo por la ciudad. (Otaku Fujiko)(Día 28, Mes de la Comadreja, Decimo Octavo año de Hantei XXXVIII, hora de la Serpiente)

//daño total 17

El asaltante te consigue conectar un golpe entre dos costillas y te deja mal herida. La sangre mancha tu delicado quimono abundantemente.

Intento pegarle

//7g4 con 2 aumentos y gasto un punto de vacío -4 , 4g4 Dif 10 + 10

El miembro 'Otaku Fujiko' ha efectuado la acción siguiente: Ofrenda a Omakasede No Kami

'Dado del imperio' :

//10 + 10 + 8 + 9
//Daño es 2+4g2 + 1g1 vacio + 2g0 aumentos -4 = 5g3

El miembro 'Otaku Fujiko' ha efectuado la acción siguiente: Ofrenda a Omakasede No Kami

'Dado del imperio' :

//Resultado = 9 + 8 + 6 = 23

Parece que el dolor que te ha infligido ha renovado tu fuerza y cortas con la katana a la altura de la ingle y lo dejas casi inservible e intentando echarse para atras para huir de ti mientras intenta gritar. -¡¡¡Koromon, es cierto que son penachos rojos!!!.- pero la voz a penas le sale.

Voy despacio a ver como esta Qetsune, y si se encuentra mejor que yo que amarre a los dos estúpidos que nos han atacado y después que suba y mire a ver que se encuentra arriba.

-Fujiko Sempai, no sera mejor que suba a ayudar a quien hay arriba.- te dice mientras empuja al que se ha encontrado en la planta baja, ya que se ha visto oblidado a matarlo.

Le digo que haga como quiera pero que vaya armado y con precaución.

Te vuelve a asentir sin decir nada mientras se dirige rapidamente hacia la escalera. Cuando pasa por al lado del individuo que te ha atacado a ti, le patea la mano para que suelte el tachi y despues le da otra en la cuchillada que le has dado tu.

Tras unos segundos para medir la situacion, lo pierdes de vista por la escalera al segundo piso.

Tras un minuto escuchas ruidos de lucha y otro individuo enmascadaro cae por las escaleras rodando con una estocada muy profunda y sangrante en el costado.

-Limpio.- escuchas al rato y la mujer pasa de gritar como una posesa a llorar desconsoladamente.

Intento subir despacio para ver a la mujer.

-Que ha pasado? Te encuentras bien?

Si encuentro algún sitio donde sentarme me siento con cuidado.

A duras penas consigues subir las escaleras pasando por encima del que te ataco que ahora esta inconsciente por la patada que Qetsune le ha dado y esquivando al que tu "joven aprendiz" tuvo que eliminar y cayo por las escaleras.

Una vez en la segunda planta, avanzas despacio sujetandote el costado y llegas al pasillo que divide la segunda planta.
En la habitacion de la izquierda, en la puerta, esta tu compañero que parece atender a alguien mientras una mujer de unos 50 a 60 años no hace mas que llorar y darle las gracias a Qetsune cogiendole el bajo del pantalon.

-Muchas gracias samurai sama, muchisimas gracias samurai sama. Si no es por usted, se lo hubieran llevado.-

En ese momento es cuando tu preguntas si la mujer se encuentra bien.

-¿Que?, ay, por todas las fortunas, samurai sama, no me diga que han herido a su esposa intentando salvar a mi marido. Dejeme mi señora que la cure por favor.- la mujer entra como un rayo en la habitacion de la derecha. Parece que su miedo ha desaparecido temporalmente. Saca de la habitacion una gasa y la rasga dejando dos piezas de un palmo por un metro y medio.

Se acerca a ti. -Con permiso mi señora.- te dice haciendo una profunda reverencia tocando el tatami con la frente, tras lo cual abre un poco la hakama y el kimono, comienza ha vendar tu costado. Al principio notas mas dolor, pero a la segunda vuelta de tu torso, la presion del vendaje alivia ligeramente tu dolor. Quizas no puedas luchar ahora mismo, pero por lo menos no te duele ni estas sangrando.

-Te doy las gracias, pero este samurai no es mi marido. ¿Por qué han venido estos hombres?. ¿A quien se querían llevar?.-

Todo esto se lo pregunto mientras está vendándome.

-Sumimasen Hime-sama, espero no haberla ofendido.- y en voz baja te dice. -Aunque es una lastima por que es un joven muy apuesto si me permite la osadia.-

Poco despues, mientras sigue curandote, da un respingo pues se ha dado cuenta de que le has preguntado que ha pasado. -Esos shinobi querian llevarse a mi marido, no se por que pero se lo querian llevar.- continua vendandote el costado y tras unos segundos, prosigue -Esta mañana temprano me fui al barrio del Borde Norte a comprar algunos perecederos y algo de pescado para el almuerzo. Fui a la casa de la señorita Shimeru, ya que su padre suele traer un pescado fresquisimo, recien pescado. Luego pase por la tienda del señor Kureme.- sacude la cabeza. -Perdon, me estoy desviando del tema. El caso es que cuando llegue a casa, la puerta estaba abierta, lo cual es raro por que tanto cuando esta abajo trabajando como cuando esta arriba Susemon siempre cierra la puerta. Tampoco le di mayor importancia, pero cuando llegue arriba me encontre con dos shinobi que estaban amordazando a Susemon y no he tenido tiempo de otra cosa que gritar.-

Le digo a Qetsune
-El marido se encuentra bien? Si esta consciente que cuente por qué se lo llevaban.
En cuanto termine de vendarme intento ponerme cómoda y le pido un poco de agua a la mujer. Además le pido que vaya a buscar a alguien de la guardia del Trueno para que venga y podamos informar.

No ha terminado de hablar la mujer, cuando entran varios hombres y uno de ellos sube por la escalera. -Guardia del Trueno, no se muevan.-

-Guardia del Trueno, soy Otaku Fujiko, y está aquí también Shinjo Quetsune.

Espero a que suban y cuando nos vea le digo que necesitaría ver a un sanador, que le informe Qetsune.

Detras sube otro de los guardias, el cual confirma tu identidad. Segun parece te recuerda de los entrenamientos de la Escuadra Relampago.

Te ayuda a levantarte y a que bajes, mientras que Qetsune y el otro guardia se quedan hablando y atendiendo a la persona que estaba dentro de la habitacion.

Cuando llegais a la planta baja hablais con el otro guardia y sale para buscar a algun curandero que termine el trabajo que empezo la mujer.

Genial, cuando Qetsune termine de hablar con el guardia y baje le preguntaré qué es lo que pasaba, habrán interrogado ya al marido.
//Quiero saber si recupero algún punto de daño.
Espero a que me atienda el curandero.

Tras unos minutos, llega un viejo con varias cajas es los brazos. Deja las cajas a tu lado y te hace una profunda reverencia. -Con su permiso.-

Ladea la ropa lo justo para poder trabajar y tras un par de minutos termina su trabajo.

El miembro 'Omakasede Sama' ha efectuado la acción siguiente: Ofrenda a Omakasede No Kami

'Dado del imperio' :

//dado de recuperacion.

El miembro 'Omakasede Sama' ha efectuado la acción siguiente: Ofrenda a Omakasede No Kami

'Dado del imperio' :